Los vecinos de Laxe llevan dos meses sin gasolinera

Repostar ahora implica desplazarse hasta Baio o Ponteceso. Es un servicio demandado por vecinos y turistas

Hace un par de meses, la gerencia decidió echar el cierre a la emblemática y única gasolinera con sede social en Laxe. La estación de servicio, perteneciente al Grupo Petronor, era muy importante para los residentes (unos tres mil vecinos), pero también para las personas que disfrutan de las vacaciones en este municipio bergantiñán eminentemente turístico. De hecho, esta gasolinera era muy demandada por los cientos de autocaravanistas que, cada año, acuden a la localidad, sobre todo amantes de los deportes náuticos, para repostar, pero también para deshacerse de las aguas grises y reponer agua en los depósitos.

Desde el Concello laxense apuntaron que hubo un intento por mediar entre algunos interesados en hacerse con las riendas del negocio y los actuales propietarios, pero a fecha de hoy sigue sin haber acuerdo debido a las diferencias entre las cifras demandadas y las ofertadas. Y es que la guerra de precios imperante en el sector han reducido notablemente los márgenes comerciales de los autónomos.

El verano está ahí, a la vuelta de la esquina, y si nada lo remedia los que quieran repostar tendrán que hacerlo en las más próximas, situadas Baio o en Ponteceso, a diez y once kilómetros, respectivamente de Laxe. La estación de servicio laxense se puso en marcha en el año 1989, coincidiendo con la inauguración de otra en Cances (Carballo), que ya cerró hace años.